En la arquitectura han surgido dos nuevas tendencias. Por un lado, lo que se denomina como diseño biofílico que tiene como objetivo lograr un equilibrio combinando recursos naturales, innovación y nuevos materiales al momento de realizar el proyecto de construcción. Apoyados en la tecnología, creatividad y diseño. Puede ayudar a disminuir la temperatura del aire y así prevé el efecto de «isla urbana» en las ciudades.
Este nuevo diseño trae ventajas para las personas:
– Mejora la salud, productividad y tranquilidad.
– Ayuda a la recuperación de enfermedades de manera más rápida.
– Disminución de problemas sensoriales.
– Mejora el comportamiento en espacios de convivencia.
– Mejora la calidad de vida, relaciones interpersonales y sensación de comunidad.
– Mejora la motivación, productividad, concentración y memoria.
– Disminuye los niveles de estrés y depresión.
Para que una construcción demuestre su tendencia hacia un diseño de estilo biofílico debe presentar tres puntos clave:
– Tener naturaleza en el espacio: Centrada en los estímulos sensoriales producidos por olores, sonidos, gustos y sensaciones generadas por objetivo propio de la naturaleza. Esta integrada y respeta el entorno natural en el que se implanta.
– Naturaleza análoga: Se trata de construir de forma que se evoque la presencia de la naturaleza, imitando formas propias del entorno vivo y natural. Además, se lleva a cabo con sistemas constructivos y materiales naturales de reducido importe ecológico.
– Naturaleza sobre el espacio: Consiste en construir espacios abiertos que proporcionen una sensación de bienestar y descanso. Buscar un diseño bioclimático y consiste en utilizar el aporte de luz y calor natural del sol y la renovación de aire natural.
Por otro lado, la tendencia del greentructure que busca formar parte de la solución y frenar el cambio climático. Priorizando los siguientes aspectos:
– Ahorro de energía: Colocar un sistema de recolección y reutilización de agua de lluvia, así como dispositivos de fontanería y riego eficiente para reducir el consumo de agua potable.
– Eficiente energética: Prioridad a la orientación de los edificios, uso de aislamiento térmico y la incorporación de tecnología de energía renovables, como paneles de energía solar o energía geotérmica.
– Utilizar materiales sostenibles para la construcción: Los materiales contienen contenido reciclado o provienen de fuentes renovables, prioriza la reducción de emisiones tóxicas y residuos durante la construcción de los edificios.
– Equipo de trabajo con diversos profesionales para conseguir objetivos ambientales: Colaboración entre arquitectos, urbanistas, diseñadores, ingenieros y otros profesionales para desarrollar soluciones integradas que optimicen el rendimiento ambiental y eficiente.
En nuestra web podrán encontrar un amplio catálogo de productos que responden a las nuevas tendencias de construcción.